¡Ya hemos vuelto a cambiar de estación! Si sientes inquietud, cansancio o estrés puede que tengas síntomas de astenia primaveral. También las alergias, como el polen o los ácaros del polvo, resaltan en esta época del año. No obstante, la primavera nos regala mejores temperaturas y la sensación de alargar las horas de sol al día, pero también nos puede traer cambios físicos y anímicos.
En entradas anteriores os hemos hablado sobre las alergias primaverales, en esta os curioseamos sobre la ‘’astenia primaveral’’
¿Qué es la astenia primaveral?
Conocemos el concepto ‘astenia primaveral’ como el conjunto de estados generales y vagos por los que las personas se ven afectadas por el cambio de estación. Puede acentuarse según el ritmo de vida de cada persona. Asimismo, se vincula a los síntomas de tristeza, cansancio, pereza, depresión, fatiga, estrés o falta de energía. Todavía no podemos asociar la astenia a ningún problema patológico, sino a un cambio físico y anímico.
5 consejos para hacer frente a la astenia primaveral
1. Hacer ejercicio físico. Si hacemos ejercicio moderado a primera hora de la mañana nos ayudará a empezar el día con energía. Además, podremos conciliar mejor el sueño por la noche y resultará un buen recuperador de energía.
2. Prever el cambio horario. Si poco a poco vamos adaptando a nuestra rutina el nuevo cambio horario, no notaremos a penas el cambio. Con adelantar la hora de descanso una hora antes a la habitual y amanecer un ahora antes, sería suficiente.
3. Cuidar la alimentación e hidratarse. Aconsejamos reducir los alimentos hipercalóricos y aumentar la ingesta de frutas y verduras. Además, con la subida de las temperaturas sudamos más y nuestro cuerpo necesita más líquido. Es muy importante una buena hidratación.
4. Mantener las rutinas de sueño. Uno de los principales síntomas asociados a la astenia primaveral es la dificultad de conciliar el sueño. El insomnio afecta a nuestro estado anímico y físico. Por ello, aconsejamos intentar dormir el total de horas diarias que habitualmente hacemos.
5. Evitar automedicarse. Cuando notamos cansancio durante el día y es poco habitual en nosotros, solemos pensar en una carencia de vitaminas. Por esta razón, cometemos el error de automedicarnos y tomar complejos vitamínicos cuando en realidad no nos hacen falta. Antes de consumir medicamentos, consultemos con nuestro médico si el problema se agrava.
También puedes diversificar tu rutina diaria, hacer ejercicio con otras personas, tomar café o té o escuchar una lista de música que nos guste y nos motive.
Si queremos evitar al máximo la astenia, sigue estos consejos y ¡disfruta de la llegada de la primavera!